¡Bienvenido de vuelta! La semana pasada hablé sobre los tipos de sketchbook que utilizo, dependiendo del propósito que quiero darles. Esta semana, quiero hablar sobre cómo empezar uno.

Lo primero que puedes hacer cuando inicias un sketchbook nuevo es decidir para que lo vas a utilizar. No pretendo que con esto te restrinjas y lo uses para un solo propósito, ya que puede ser contraproducente. Sin embargo, en un principio, es bueno darle una razón de ser.
Pregúntate lo siguiente:
¿Cuál es mi presupuesto?
¿Cuánto tiempo tengo para dibujar?
¿Qué me gusta dibujar?
¿Hay algo en particular que quiera practicar?
¿Lo usaré solo en casa, o me lo llevaré a todos lados?
¿Prefiero bocetar de forma tradicional o digital?
¿Qué clase de materiales tengo?
Hay muchos artistas que aconsejan llevar tu sketchbook a todos lados gracias a sus beneficios, pero hay otros a quienes se les complica mucho, o prefieren dibujar en ciertos lugares y a ciertas horas. Conocer tus hábitos respecto al dibujo te ayudará a decidir que es mejor para ti.
En mi caso, me di cuenta de que amo dibujar en las mañanas, cuando nadie me distrae y tengo tiempo para disfrutar. Por supuesto, eso es solo posible los días que me quedo en casa (salgo tres veces a la semana debido a mi trabajo), así que intento programar un rato en las mañanas que sé voy a estar en casa, sea que dibuje en mi sketchbook o en mi laptop de forma digital. Para ti puede ser durante la tarde después de la escuela, en tiempos libres a lo largo del día, o en la noche después de trabajar. Para algunos artistas, dibujar en conjunto con otros es lo mejor, pues no les gusta hacerlo solos. De nuevo, esto va a depender de cada quién.
Sobre los materiales
Cuando recién empecé a dibujar, usaba mucho estilógrafos desechables y lápices de colores, pues era lo que tenía a la mano. Cuando compré mis primeros marcadores de alcohol, me di cuenta de que necesitaba papel más grueso, pues se traspasaba a las demás páginas si no le ponía algo por debajo. Sin embargo, para usar mis estilógrafos y lápices de color podía usar papel muy sencillo. Tiempo después, compré mi primer tableta digitalizadora, por lo que pasaba mucho tiempo dibujando en digital.
Otro factor importante a considerar es tu presupuesto. Los sketchbooks y las tabletas pueden ser algo caras. Para los sketchbooks, el precio va a depender del tamaño, el tipo de papel que vas a usar y la marca. En cuanto a las tabletas, dependerá del tamaño y la marca. Afortunadamente, hay muchas opciones.
Yo vivo a las afueras de la Ciudad de México, donde puedo ir a una tienda llamada Lumen y encontrar una gran variedad de sketchbooks, desde los más básicos (alrededor de $5 dólares) hasta los más caros (entre $26 y $30+ dólares). Muchas veces solo compro blocs de hojas sueltas de papel especial y encuaderno yo misma. En un principio, solía usar papel bond del que usas para imprimir o libretas baratas del Walmart o la papelería más cercana. Fue hasta que pude costear sketchbooks más caros que empecé a comprarlos. ¡No te limites por la cantidad de dinero que tienes! Cualquier opción a tu alcance está bien.
Si te intimida el comprar sketchbooks caros que no quieres “arruinar”, empieza con uno barato y pequeño para agarrar confianza, sobre todo si es tu primera vez haciéndolo. No tiene nada de malo comenzar con algo pequeño. Recomiendo mucho usar sketchbooks con papel barato en un principio, donde puedes ser tan desordenado y experimental como quieras, sin temor a cometer errores o si tus bocetos recibirán muchos likes. Habrá veces en las que quieras experimentar con tinta, marcadores o pintura: materiales que necesitan un tipo especifico de papel. Cuando esto ocurra y tu presupuesto no sea mucho, puedes buscar sketchbooks o blocs con papel para medios mixtos barato que puedas costear, así no te sentirás culpable por experimentar con él.
Si dibujas de forma digital, hay muchas opciones también. En lo personal no recomiendo tabletas digitalizadoras con pantalla en un principio, ya que es una inversión algo fuerte. Una tableta digitalizadora barata y pequeña que maneje sensibilidad a la presión es más que suficiente. Puedes crear un folder en tu computadora llamado “Sketchbook digital”, crear diferentes archivos cada día (nombrándolos por fecha o por “número de página”) y exportarlos como JPGs o PNGs. Otra opción es intentar hacer un sketch dump, donde juntas varios bocetos en un mismo archivo. Por último, ¡puedes crear PDFs o hacer presentaciones con esas imágenes!
Una vez que conoces tus horarios, materiales, tu presupuesto y el objetivo para el que quieres usar el sketchbook, llegó el momento de empezar. Sé consciente de que, dependiendo de la calidad de papel de tus blocs/sketchbook y de si lo vas a cargar fuera de casa o no, es que elegirás una opción sobre la otra. Debido a esto considero que trabajar de forma digital tiene una gran ventaja, pues no tienes una libreta en físico que puedas arruinar: solo basta con abrir un archivo, hacerlo tan grande como quieras y empezar a jugar. Si te acomodas mejor bocetando de forma digital, ¡hazlo! in embargo, dibujar en papel tiene sus beneficios también.
En la primer página, haz una lista de las cosas que quieres practicar, por ejemplo:
Practicar dibujo de cabezas
Practicar formas en 3D
Practicar mi entintado
Trabajar en mis diseños de personaje…etc.
Esta lista te ayudara cuando no sepas exactamente que dibujar. Sin embargo, no significa que debas solo limitarte a lo que escribiste ahí, se trata de una herramienta para ayudarte a comenzar.
La próxima semana te daré algunos ejercicios que puedes usar para comenzar en tu sketchbook nuevo. Que tu arte persista como un fantasma a través de las épocas, por toda la eternidad.
Hasta que el llamado del cuervo resuene una vez más…. ¡sigue bocetado!